Investigadores de Teleco proponen instalar vallas de árboles para reducir la contaminación electromagnética en parques de colegios o geriátricos.

Faro de Vigo, 17/12/07

Barreras verdes contra las ondas del móvil

Investigadores de Teleco proponen instalar vallas de árboles para reducir la contaminación electromagnética en parques de colegios o geriátricos.
SANDRA PENELAS / VIGO Naturaleza e ingeniería se alían en un mismo proyecto para reducir la contaminación que las ondas electromagnéticas de los teléfonos móviles generan en los parques infantiles y jardines geriátricos. Los experimentos del equipo del profesor de Telecomunicaciones Íńigo Cuińas demuestran que una barrera de árboles atenúa los niveles de potencia iniciales tanto de GSM como UMTS (segunda generación) hasta en dieciocho veces dependiendo de la especie elegida.
"Los nińos y ancianos no son usuarios habituales de móviles, por lo que en estos espacios no se necesita una cobertura tan buena. Además tienen por ley la consideración de zonas sensibles y se vigila con especial rigor que las mediciones sean lo más bajas posibles", explica el investigador del grupo de Sistemas Radio.
Las progresiva sustitución de las vallas de hormigón por otras vegetales en los márgenes de las carreteras para reducir el ruido del tráfico y algunos estudios aislados sobre los efectos de los árboles en las ondas le dieron la idea para este proyecto que ahora subvenciona la Xunta dentro de su programa de I+D.
"Nadie llevaría a su hijo a una escuela con un patio rodeado de un muro de cemento, pero la valla vegetal, aunque no elimina completamente la contaminación, es una solución más blanda. No estorba a la vista y además es ecológica", defiende.
El único requisito para que los árboles cumplan su función es que "bloqueen la visión de la estación base o antena desde el patio o el jardín".
Diferentes especies
Los experimentos se realizaron con un solo ejemplar en una cámara anecoica, donde se anulan la reverberación y el eco, y con barreras de varios ejemplares dispuestos en zig zag o en línea y con mayor o menor separación entre ellos en una de las terrazas de la escuela. También se tuvo en cuenta la variable del viento con distintas velocidades y ángulos.
Los ingenieros utilizaron hasta siete especies diferentes de interior (arecas, ficus y chefleras) y de exterior (camelios, juníperos,callistemum y tuyas) para concluir que las más adecuadas son las que tienen mayor densidad de follaje y, por supuesto, sean perennes.
Las barreras más efectivas son las de juníperos porque consiguen atenuar la contaminación hasta en doce decibelios, lo que supone dividir por dieciocho la potencia inicial. Los camelios la reducen hasta em una cuarta parte; los callistemum, en un tercio; y las tuyas, a la mitad.
Los resultados son "realmente significativos" y ya han sido publicados en la revista científica internacional Electronics Letters y presentados en congresos como el EuCAP celebrado el mes pasado en Edimburgo.
El equipo de ingenieros continuará haciendo experimentos exteriores con estas vallas ecológicas y el siguiente paso será comprobar su efectividad en el patio de un colegio o guardería.
"Las protestas contra las antenas no están justificadas"
Este proyecto aumenta las cautelas que ya establece la legislación de la UE, puesto que ninguna medición en zonas sensibles se ha acercado hasta ahora a los límites: "El nivel más alto se registró en Madrid y fue de 2,47 microvatios por centímetro cuadrado cuando el permitido está en 450". Esta cifra, explica Cuińas, resulta de dividir por 50 el límite a partir del cual las ondas electromagnéticas causan efectos biológicos, que no tienen por qué ser dańinos, en el cuerpo.
"La repercusión del tabaco se estudia desde hace mucho tiempo, pero no hay gente que lleve utilizando el móvil 50 ańos", ańade. Aún así, asegura que las protestas por la instalación de antenas "no están justificadas más que desde el punto de vista estético". De hecho su equipo trabaja para reducir el impacto visual camuflándolas como chimeneas o como parte de las cruces de las iglesias. "Los centros comerciales tienen antenas en los techos interiores que no se ven y a la gente no le duele la cabeza", argumenta.

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